Me gusta ver desperezarse a las mujeres por las mañanas; el descuido del pelo, la
mirada aún difusa, cierto rubor en la piel y los labios mucho mas
sugerentes que cuando se acostaron. Me gusta ver cómo aparece su ombligo bajo el pijama cuando se estiran. Me gusta que ronroneen como un gato antes de levantarse. Me gusta que saquen una pierna del edredón y se miren el pie como si no lo reconocieran. Me gusta que no digan nada y sin embargo lo digan todo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario