jueves, 26 de febrero de 2015

CINCO CENTÍMETROS


Hay que ver lo que pueden cambiar las cosas los escasos cinco centímetros que separan una mejilla de la comisura de los labios. Da vértigo imaginar que dependemos de distancias tan nimias.

martes, 24 de febrero de 2015

SU CULO


"Le apeteció de pronto desnudarse y nadar. Miró hacia atrás y hacia los lados, intentando descubrir si alguien podía verla. ¿Quién podría estar por allí salvo sus amigos? Tal vez fuera la expectativa de saberse observada lo que hizo que no se lo pensara más. Podría imaginarlos detrás de un árbol, asomando la cabeza con disimulo, fijando sus miradas en su espalda, en su culo. Pensó en su culo. “¿Todavía es un buen culo?”. Cuando de su físico se trataba, su autoestima no tenía afirmaciones, tan sólo preguntas..."

lunes, 23 de febrero de 2015

LA MANO


"Sintió entonces que ponía la mano en su muslo, sobre los vaqueros. La dejó allí, quieta, no como cuando eran novios. Visualizó la mano con los ojos cerrados. ¿Desde cuando se hacía su marido la manicura? Ya no lo recordaba; se sorprendió de no recordarlo. Dedos largos, proporcionados a la estatura, estilizados, sin anillos, con un par de manchas incipientes en las que nadie reparaba por quedar a la sombra de un Rolex Sea-Dweller, sumergible a los puñeteros mil doscientos metros donde le gustaría estar a ella. Una mano con apenas vello, como de muerto. Una mano en otro tiempo ágil y ansiosa, dotada para acariciar. Una mano ahora incapaz de amasar pan. O de encender un fuego"...
www.caunedo.blogspot.com 

domingo, 15 de febrero de 2015

JÖRGEN

Jörgen es noruego. Siempre ha querido ser escritor. Hace unos meses terminó su primera novela. La mandó a todas las editoriales de Noruega y poco a poco fueron llegando cartas desestimando su publicación. Ofendido su orgullo, se prometió no volver a comprar libros de todas aquellas que rechazaron su obra. Pronto se dio cuenta de que ya no podía comprar libros en su país, así que se trasladó a España para probar suerte. Vive en mi edificio. Ayer me dejó su manuscrito para que yo lo valorara. He pasado la noche en vela leyendo y no sé si decirle la verdad o suavizarle una mentira. Ahora que ya he probado su lutefisk no me gustaría que dejara de ser mi vecino.

lunes, 9 de febrero de 2015

LA BARBACOA DE IBIZA

"Es muy raro que un inglés sepa hacer una barbacoa, no lo llevamos en la sangre, no es lo nuestro. Somos demasiado remilgados para tanto lío. A los americanos se les da mejor. A ellos no les importa eso de mancharse las manos, oler a humo y beber cervezas a morro mientras cocinan como si estuvieran en un camping. Cuando vivía en Inglaterra jamás en la vida hicimos una barbacoa; de hecho no teníamos dónde hacerla.
Fue idea de James construir una en mi jardín de Ibiza. Era blanca, redondeaba, de formas sinuosas, con distintos apartados para la leña, parrillas y herramientas. La había montado justo al lado de una pérgola envuelta en una buganvilla fucsia que daba sombra a una gran mesa de madera y dos bancos.
El lugar era estéticamente precioso con esa combinación del blanco, el fucsia y el azul del mar de fondo, pero debo reconocer que hasta entonces no se me había ocurrido utilizarla..."
www.caunedo.blogspot.com

viernes, 6 de febrero de 2015

INFORMES DE LECTURA


Si tienes una novela escrita encerrada en un cajón y no sabes qué hacer con ella, me pongo a tu disposición para realizar un informe de lectura avalado por mis años de experiencia como tutor y coordinador de talleres de escritura creativa en Yo quiero escribir —el taller de Carmen Posadas—, en la editorial Playa de Ákaba y en el estudio de Leticia Zarza.
Estructura, trama, personajes, ambientación, diálogos, tono... un informe completo que te servirá para tener una visión objetiva de tu texto, consejos para mejorarlo y observaciones para que tu novela gane en calidad.
Ponte en contacto conmigo a través de rafacaunedo@yahoo.es y te explicaré el sistema. 
Y si vives en Madrid, hasta podemos tomar un café charlando sobre tu obra.

jueves, 5 de febrero de 2015

PRIMERA EXPOSICION

"Leyendo el artículo sentado en un banco del parque Monceau rememoraba lo ocurrido la tarde anterior durante la inauguración de mi exposición, aquel constante flujo de personas que se acercaban a mí para saludarme y darme la enhorabuena después de haber dado una fugaz e indiferente pasada delante de mis cuadros. Todos, absolutamente todos, hablaban en grupitos con un vino en la mano sin apenas hacer caso al motivo que los concitaba. Nadie me conocía, de suerte que pude ver a Kowalsky haciendo las funciones de portero en la puerta, dando indicaciones de hacia dónde debían dirigirse para saludar al artista. “Es aquel de allí, el larguirucho, el que tiene cara de inglés”, le oí decir a una pareja que no pudo por menos que sonreír al escuchar tan exacta descripción".
www.caunedo.blogspot.com

martes, 3 de febrero de 2015

UN ETONIAN EN PARIS

Algo bullía por aquella época en las calles de París. Los primeros años de la década fueron el origen de la convulsión que llegaría en el 68. Manifestaciones de argelinos que pedían la descolonización de su país, movimientos de izquierdas antiimperialistas o protestas contra la guerra de Vietnam eran las habituales noticias de los periódicos. Y en medio de todo eso, un etonian iluso y soñador se paseaba por la vida mirando las luces de las ventanas de las maravillosas fachadas parisinas, imaginando historias de amoríos entre vecinos, engaños de escalera y folletines de ascensor. Solía caminar mirando hacia arriba, hacia los edificios, de suerte que rara vez veía lo que pasaba de frente, como si huyera de lo que el destino me ponía delante prefiriendo lo que estaba por encima. Cuanto más alejado estaba de la realidad, más feliz era. La gente feliz siempre mira hacia arriba.