"Es muy raro que un inglés sepa hacer una barbacoa, no lo llevamos en la sangre, no es lo nuestro. Somos demasiado remilgados para tanto lío. A los americanos se les da mejor. A ellos no les importa eso de mancharse las manos, oler a humo y beber cervezas a morro mientras cocinan como si estuvieran en un camping. Cuando vivía en Inglaterra jamás en la vida hicimos una barbacoa; de hecho no teníamos dónde hacerla.
Fue idea de James construir una en mi jardín de Ibiza. Era blanca, redondeaba, de formas sinuosas, con distintos apartados para la leña, parrillas y herramientas. La había montado justo al lado de una pérgola envuelta en una buganvilla fucsia que daba sombra a una gran mesa de madera y dos bancos.
El lugar era estéticamente precioso con esa combinación del blanco, el fucsia y el azul del mar de fondo, pero debo reconocer que hasta entonces no se me había ocurrido utilizarla..."
www.caunedo.blogspot.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario