martes, 18 de diciembre de 2012

YO Y LA AFINACIÓN

Mi ultimo trabajo del día de ayer fue un Steinway de principios del XX. Su propietaria resulto ser una abogada que acababa de llegar a casa muy cabreada después de pasar el día discutiendo con sus clientes en la cárcel. La afinación de un Steinway es algo más compleja de lo normal y para comprobar el resultado, improvisé algo casi sin pensar. Me salió el principio de uno de los Planetas de Holst, concretamente Júpiter. Ella se sorprendió, me miró, y luego me preguntó si sabía tocarla a cuatro manos.
Estuvimos un cuarto de hora dale que te pego, muslo contra muslo, desahogándonos y divirtiéndonos.
Al acabar, hicimos lo mismo en el sillón, ya sin música ni piano.

3 comentarios:

  1. jajajjaja, perooo¡que pasa hoy! es el tercer blog que visito y el termómetro sexual esta a reventar. a ver si resulta que ahora la Navidad la sangre altera.
    Con estas notas de alta tensión y sus roces incluidos te deseo una buena afinación para el próximo año.
    Besitos de gofio.

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  2. La próxima vez que lo afines prueba con Marte, comienza suave pero luego...
    Me encanta tu blog, un abrazo

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