El
teatro estaba cerrado por su acceso principal, como es lo normal a
esas horas de la mañana, así que directamente fui a la entrada de artistas de la
calle lateral, donde un telefonillo roñoso era la única vía de
comunicación con el interior. Me abrió un técnico de iluminación al
que conocía de otras ocasiones pero del que había olvidado el
nombre. Él, sin embargo, me trató por el mío y me acompañó hasta
la entrada lateral de la platea, rogándome hiciera el menor ruido
posible porque el ensayo estaba en marcha.
⸻Ya
sabe que a su mujer no le gusta que la interrumpan ⸻me dijo
susurrando antes de entrar.
⸻Ex
mujer ⸻aclaré⸻. Ex.
Al
parecer aquel tipo era bueno con los nombres, pero muy malo para
acordarse de lo importante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario