jueves, 2 de febrero de 2017

ESA MEMORIA

El teatro estaba cerrado por su acceso principal, como es lo normal a esas horas de la mañana, así que directamente fui a la entrada de artistas de la calle lateral, donde un telefonillo roñoso era la única vía de comunicación con el interior. Me abrió un técnico de iluminación al que conocía de otras ocasiones pero del que había olvidado el nombre. Él, sin embargo, me trató por el mío y me acompañó hasta la entrada lateral de la platea, rogándome hiciera el menor ruido posible porque el ensayo estaba en marcha.
Ya sabe que a su mujer no le gusta que la interrumpan ⸻me dijo susurrando antes de entrar.
Ex mujer ⸻aclaré⸻. Ex.
Al parecer aquel tipo era bueno con los nombres, pero muy malo para acordarse de lo importante.

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